Un clásico de casa con brócoli bien verde, sin amargor, y con esa cubierta que cruje cuando la cortás… puro amor.
Ideal para: acompañamiento de carnes o como plato vegetariano completo.
Ingredientes (4 porciones):
500 g de brócoli congelado Grupolar
500 cc de leche
2 cucharadas de manteca
2 cucharadas de harina
1 cucharadita de mostaza (opcional)
Sal, pimienta y nuez moscada
150 g de queso rallado (mitad mozzarella, mitad parmesano o reggianito)
Pan rallado (cantidad necesaria)
Aceite de oliva o manteca para gratinar
Preparación paso a paso:
Cocinar el brócoli:
Herví agua con sal y cociná el brócoli sin descongelar durante 4 a 6 minutos, hasta que esté tierno pero firme. Colalo y reservá.
Preparar la salsa blanca (bechamel):
En una olla derretí la manteca, agregá la harina y cociná revolviendo 2 minutos (formás el roux).
Incorporá de a poco la leche caliente sin dejar de revolver, hasta que espese.
Condimentá con sal, pimienta, nuez moscada y, si te gusta, un toque de mostaza.
Unir y preparar para el horno:
En una fuente para horno enmantecada, colocá el brócoli, verté la salsa blanca por encima y mezclá un poco para que se meta bien entre los ramilletes.
Cubrí con el queso rallado mezclado con un poco de pan rallado.
Gratinar:
Llevá a horno fuerte (220°C) durante 15-20 minutos o hasta que se forme una costra dorada y crocante.
Servir caliente, como guarnición o plato principal con pan.